miércoles, 17 de septiembre de 2008

Ser mamá - Ser tú Angel



Buenas tardes
Damas y caballeros, jóvenes y niños presentes

En esta oportunidad, tomo la palabra para dirigirme a ustedes y conversar de un tema que guarda relación con lo que actualmente estoy viviendo y afrontando todos los días.

Estoy casi cerca de poder entender la preocupación, el amor desinteresado que mantienen las madres hacia sus hijos. Siempre tuve problemas para poder entender a mi madre, que con sus palabras y advertencias creía que lo hacía para fastidiarme, sin pensar que su verdadera razón estaba basada en el amor que me profesa.

No soy hija única, detrás y delante de mí tengo hermanos y hermanas que admiro y amo. Mi madre nos ha tratado siempre con amor y de igual manera, y ahora cada uno de nosotros somos diferentes y a la vez iguales. Sin embargo a estas alturas comprendo las palabras y tratos de mi madre hacia mí. Nunca pensé sentir el amor que uno tiene a su hijos, el cual es totalmente diferente y único que solo lo tienen las mamás o las que está a punto de serlo.

Lamento mucho los malos momentos que le hice pasar a mi madre sin saber que ella lo hacía por pura preocupación, no solo porque me quería sino porque no quería que me pasaran cosas que a ella le pasó.

Bueno, lo que quiero decirles es sobre la importancia de ser mamá. De lo que estoy experimentando actualmente.

Desde hace 4 meses me he enterado que voy hacer madre y créanme que me da mucho miedo pero a la vez siento muchas emociones. No se imaginan lo que pienso al acostarme, la certeza de saber que mi bebé me escucha, me siente, hasta el más mínimo susurro, él escucha. No puedo esconder mis sentimientos, así como él asimila mis alimentos, se alimenta de mis emociones, de mis momentos tristes y alegres.

Actualmente me siento bien, a parte de las preocupaciones económicas, laborales, profesionales presentes, pero con tanta emoción de que llegue el día que dé a luz. A veces imagino su rostro, cómo será su comportamiento y sin embargo tengo miedo de hacer las cosas mal.

Ya soy mamá y me siento más que feliz, dichosa y virtuosa. Dicen que hay tantas mujeres que tratan de salir embarazadas y no pueden. Y yo que sin planificarlo lo tengo, lo acepto con todo lo que venga.

Me conmovió un poema que me llegó hace unas horas, enviado por mi hermana I., sobre lo que significa la llegada del bebé. Este dice que nosotras las mamás, somos las elegidas por Dios para ser los ángeles de nuestros propios hijos. Quienes a nuestros bebes les enseñaremos a caminar, a comunicarse, a afrontar la vida y sobre todo a guiarlos hacia Dios.

Yo como el “Angel” elegido para mi bebé, lo espero y quiero cuidarlo siempre….